La normativa acerca de los gases flurorados que recientemente ha entrado en vigor hace que se ponga el foco en alternativas más eficientes energéticamente y mucho menos contaminantes, como es el caso del gas refrigerante R32. Conozcamos un poco más este gas que cuenta con grandes ventajas y un prometedor futuro dentro del sector de la climatización.
El R32 es un gas refrigerante que ha sido utilizado como componente en mezclas de refrigerantes HFC muy extendidas en el sector como el R407C, R410A, R442A (RS50), R407F, R407A, RS70…. Sin embargo, su uso en estado puro no ha sido muy utilizado hasta ahora, pero poco a poco su uso empieza a extenderse, sobre todo en equipos de climatización domestica como los splits.
Entre sus principales ventajas respecto a otros refrigerantes “tradicionales” destaca que tiene un impacto nulo en la destrucción de la capa de ozono del planeta y, que supone un impacto mucho menor en cuanto a calentamiento global ya que su índice de Potencial de Calentamiento Global es hasta tres veces inferior.
Además, su mayor eficiencia energética permite que sea necesario hasta un 30% menos de cantidad de gas para el funcionamiento de los equipos de climatización. Y ofrece excelentes propiedades termodinámicas como refrigerante con características de refrigeración similares a los refrigerantes R22 y R502.
Obligaciones y requisitos para la instalación de equipos con R32
Es importante conocer las características y la normativa a cumplir en cuanto al uso de este refrigerante ya que se considera de seguridad medida (grupo L2) por su grado de inflamabilidad, ya que la presión de vapor y la temperatura de descarga en la compresión son demasiado altas.
Según el RSIF-RD 138/2011 existe una regulación clara del R32 que incluye precauciones, obligaciones y requisitos para la instalación, el propio instalador y el propietario del equipo:
- Cantidad Máxima por instalación: Máximo 2,5 Kg en viviendas y espacios de uso público y máximo de 10 kg para oficinas o usos de acceso restringido.
- Obligaciones para el instalador:
- Contar con herramientas con escala manométrica R32
- No realizar uniones abocardadas en el interior del local
- Certificación de instalador Nivel 2 y disponer de un técnico titulado
- Seguro de Responsabilidad Civil de 900.000 euros
- Obligaciones para el propietario:
- Contar con proyecto de la instalación y Certificado Técnico de la Dirección de obra
- Seguro de Responsabilidad Civil de 500.000 euros
- Contratar mantenimiento y revisiones periódicas de la instalación
Propuesta para rebajar las exigencias del R32
Para afianzar el uso del R32 y potenciar su desarrollo, existe una propuesta para «relajar» y hacer más sencillos los requerimientos anteriores. Este cambio normativo que facilita la instalación, los requisitos para el instalador y el usuario está pendiente de estudio.
- Cantidad Máxima por instalación: Hasta 1,8 Kg sin requerimiento, de 1,8-12 Kg con memoria técnica y de 12 Kg hasta 60 Kg con proyectos técnico.
- Obligaciones para el instalador:
- Usar nuevas herramientas con escala manométrica R32
- Solo uniones abocardadas en la unión con la unidad interior
- Contar la certificación de instalador Nivel 1 (<30 kW) o RITE
- Seguro de Responsabilidad Civil de 300.000 euros
- Obligaciones para el propietario:
- Presentar de forma telemática ante el organismo competente de la Comunidad Autóma
- Memoria Técnica
- Certificado de la instalación frigorífica
- Manual de servicio específico para gases A2L
- Presentar de forma telemática ante el organismo competente de la Comunidad Autóma
En resumen, el R32 es un tipo de gas que tiene un futuro muy prometedor por lo que su uso se prevé que se irá extendiendo a los equipos a corto y medio plazo.