La mayoría de los equipos de aire acondicionado que se instalan en un hogar pertenecen al género de los denominados split, dispositivos cuyos componentes están divididos en dos unidades, interior y exterior.
La disposición tiene la finalidad de mejorar su rendimiento y ser más eficientes en el tratamiento del aire. Así, la evaporación tiene lugar dentro de la vivienda y la condensación, que genera mucho calor, fuera de la casa.
Por otra parte, este tipo de sistema de climatización tiene un menor impacto estético sobre la vivienda. La unidad interior muestra el aspecto de cualquier electrodoméstico de nuestra casa. Incluso, los fabricantes ofrecen diferentes tipos de diseños y acabados para que se integren mejor en la decoración.
La unidad exterior, mucho más aparatosa, no es visible desde el interior del inmueble. Alberga los elementos esenciales del proceso de refrigeración: el compresor, el condensador, el ventilador y la válvula de expansión. Se comunica con la unidad interior a través de tuberías de cobre con las que se forma un circuito por el que circula el gas refrigerante.
Es conveniente que se instale en un espacio abierto, y preferiblemente al aire libre, puesto que su actividad genera mucho calor. El componente más importante es el compresor, responsable de comprimir el gas refrigerante y aumentar su presión para lanzarlo al condensador.
Hoy día, como ocurre en los equipos de Kosner, el compresor utiliza la tecnología inverter, por la que funciona a velocidad variable según la temperatura de la estancia que hay que climatizar, de acuerdo con la información que recibe de la sonda de temperatura y el nivel de refrigeración que quiere alcanzarse.
Por su parte, el condensador se ocupa de convertir el gas refrigerante a estado líquido, para que a través de la válvula de expansión llegue al evaporador de la unidad interior, encargado a su vez de lanzar el aire frío a la estancia y refrigerarla. Una vez realizada esta tarea, el gas regresa por el circuito hasta el compresor, que le devuelve las condiciones necesarias para volver a comenzar el proceso.
Debido al calor producido por el compresor y el condensador, entre los componentes de la unidad externa también está el ventilador, que tiene la función de refrigerar estos dos componentes mediante la inyección de aire del exterior.
Como se encuentra fuera de la casa y tiene un aspecto mucho más industrial que la unidad interior, a menudo los usuarios olvidan que desempeñan una función muy importante en la climatización y no se le realiza el adecuado mantenimiento.
Por eso, es muy recomendable que todos los años sea sometida a una limpieza y revisión por parte de un instalador autorizado, que sabrá velar por un correcto funcionamiento del aparato durante toda la temporada.